Desde los primeros años de existencia de la Asociación se plantea reivindicar la llegada del metro a Carabanchel Alto. Muchos años pasaron desde aquella primera asamblea de febrero de 1989 en la que se acordó iniciar una campaña de recogida de firmas para que el metro llegara al barrio.
Años de manifestaciones, retrasos, incumplimientos, movilizaciones en las que participó todo el barrio.
Años de espera y lucha hasta que el 11 de Junio de 2004 la Presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre y el Consejero de Transportes e Infraestructuras Francisco Granados, acordaron con representantes de la Asociación de Vecinos y de la Plataforma PAU de Carabanchel la construcción de una estación de metro en el casco antiguo del barrio y otra en el nuevo PAU.
El proyecto de ampliación de la línea 11, de no haberse producido una oleada de protestas y movilizaciones vecinales materializadas en más 3.000 alegaciones, hubiera supuesto que el metro pasara de largo por nuestro barrio.
LAS RAZONES DE UN HISTÓRICO TRIUNFO
LA CONSTANCIA EN LA MOVILIZACIÓN.-
Los vecinos y vecinas de Carabanchel Alto hemos dado ejemplo de perseverancia en esta reivindicación desde que allá por el año 1977 se pidiera por primera vez el metro. Concentraciones, manifestaciones, inauguraciones, envío masivo de tarjetas y cartas, tren de plástico, globos, mosaico humano y más de 3.000 alegaciones presentadas recientemente, han jalonado esta andadura. Algunas veces éramos muchos; otras muy poquitos. ¿Os imagináis lo que habríamos adelantado si hubiera respondido a las convocatorias el doble de vecinos y vecinas?.
LA UNIDAD ENTRE EL CASCO ANTIGUO Y EL PAU.-
Los nuevos vecinos del PAU, futuros vecinos también del barrio, se solidarizaron desde el primer momento con los que llevan viviendo y luchando por el metro en Carabanchel Alto desde hace muchos años. Estos últimos reconocieron el gesto, y juntos, unos y otros, hemos logrado que la línea 11, que inicialmente pretendían llevar por la Av. de los Poblados, pasando de refilón por el barrio, finalmente entre en el casco antiguo en dirección al PAU, que también tendrá, al menos, una estación en su parte central, y cuyas obras darán comienzo en esta misma legislatura.
RELACIÓN CON TODOS LOS IMPLICADOS.-
La petición del metro se la hicimos llegar desde el principio a los responsables de la Junta Municipal, de la Consejería de Transportes, del Consorcio de Transportes, de MINTRA; también a los partidos políticos en el gobierno y la oposición. Ha dado tiempo a que las instituciones hayan estado gobernadas por diferentes partidos, y a todos les pedimos, con la misma fuerza, la llegada del metro. También hemos cuidado la relación con los medios de comunicación, que se convierten en notarios y altavoces de nuestras movilizaciones y justas reivindicaciones, teniendo recopilado un amplio dossier con noticias, fotos, videos, cartas al director, etc. La originalidad de algunas manifestaciones ha facilitado también el que los medios nos hayan dedicado mayor atención.
MUCHO ÁNIMO, CONFIANZA Y TRABAJO EN EQUIPO.-
Las luchas a veces son espontáneas; pero para lograr una continuidad es preciso que haya personas que se implican más en la preparación, las convocatorias, las llamadas telefónicas, las reuniones, ofreciendo parte de su tiempo libre y de sus energías en el empeño por alcanzar una ilusión común. Muchas personas se han ido relevando en estos trabajos a lo largo de los años, porque la ilusión no es igual todos los días, y las ideas también terminan por agotarse; pero la solidaridad permite que cuando alguien se desanima, otra persona renueva los impulsos, las iniciativas, las propuestas. Gracias a este trabajo en equipo hemos sido capaces de señalar a la administración incluso dónde debían poner las estaciones, lo que finalmente han aceptado. A estas numerosas personas, que en algún momento dedicaron sus mejores esfuerzos al servicio de los demás, no es necesario que les agradezcamos nada, pues la satisfacción de ver realizado un sueño casi imposible es la mejor recompensa.
junio de 2004
Asociación de Vecinos de Carabanchel Alto
Plataforma PAU de Carabanchel
COMPROMISOS DE LA COMUNIDAD DE MADRID
Estos son los compromisos que la Presidenta y el Consejero de Transportes de la Comunidad de Madrid adquirieron ante una delegación de los vecinos de Carabanchel Alto el 11 de junio de 2004, y que han sido recogidos ampliamente por los medios de comunicación.
1.- Realización de las obras de prolongación de la línea 11 de metro desde Pan Bendito hasta Carabanchel Alto, que, con un coste de 96 millones de euros, deberán estar terminadas antes de mayo de 2007. Dicha prolongación contará con dos nuevas estaciones:
Avenida de los Poblados, cerca del extremo este del PAU de Carabanchel
Carabanchel Alto, bajo la parcela militar entre el callejón de la Rosa, la calle Chirimoya y la Avenida de Carabanchel Alto, situándose la boca en la parte de esta avenida más cercana a la plaza de la Emperatriz (actualmente hay un pequeño parque infantil).
2.- Realización de las obras de prolongación de la línea 11 de metro desde Carabanchel Alto hasta la UE2 del PAU de Carabanchel, con un coste de 72 millones de euros, cuyas obras empezarán en esta misma legislatura (en el año 2005) y se terminarían antes o después de las elecciones de 2007. Contará con una estación, bien en la glorieta de intersección de la Avenida de Carabanchel Alto con la avenida principal del PAU, o bien bajo el parque situado más al oeste. La ubicación definitiva dependerá de la decisión que se adopte en los próximos meses sobre si la línea 11 se orienta hacia Leganés Norte o hacia La Fortuna, respectivamente.
Nuestro propósito, como vecinos, es la vigilancia para que se cumplan estos compromisos y no nos engañen una vez más. Y además debemos solicitar que se acometa la prolongación de la línea 11, tanto hacia el sur (Leganés, La Fortuna, Metro Sur) como hacia el norte (estaciones de Atocha y Chamartín); sólo de esa manera tendrá verdadera utilidad esta conexión con la red de metro que ahora conseguimos.